Puedo decir que mientras escribo estas líneas soy más fuerte en lo mental, aunque estoy más tocado en lo físico. Espero y me comprometo a poner remedio a esto último.
Buen artículo. Me han gustado tus reflexiones sobre la soledad. En marzo de este año hice el Camino Primitivo desde Oviedo en solitario ( estoy relatando la crónica, etapa por etapa, en mi newsletter). Al ser temporada baja no había muchos peregrinos e incluso durante cuatro días seguidos no me crucé absolutamente con ninguno.
Yo estoy muy acostumbrado a caminar y a hacer senderismo yo solo, y disfruto mucho de esa soledad buscada. Para mí, que tiendo a ser un poco asocial, el descubrimiento fueron los agradables momentos que pasé junto a otros peregrinos, especialmente al final del día, compartiendo experiencias o ayudándonos unos a otros en lo que necesitáramos. Algo que echaba un poco de menos cuando dormía yo solo en algún albergue.
Nuevos caminos, nuevos aprendizajes y desafíos.
Las experiencias plasmadas en este texto son VIDA…así en mayúsculas 😌🙌🏼
Maravilla... Ya te veo haciendo el Portugués 🙂
Es el próximo en la lista, por supuesto. 😌😌
Buen artículo. Me han gustado tus reflexiones sobre la soledad. En marzo de este año hice el Camino Primitivo desde Oviedo en solitario ( estoy relatando la crónica, etapa por etapa, en mi newsletter). Al ser temporada baja no había muchos peregrinos e incluso durante cuatro días seguidos no me crucé absolutamente con ninguno.
Yo estoy muy acostumbrado a caminar y a hacer senderismo yo solo, y disfruto mucho de esa soledad buscada. Para mí, que tiendo a ser un poco asocial, el descubrimiento fueron los agradables momentos que pasé junto a otros peregrinos, especialmente al final del día, compartiendo experiencias o ayudándonos unos a otros en lo que necesitáramos. Algo que echaba un poco de menos cuando dormía yo solo en algún albergue.
Un saludo y ¡buen camino!